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La alopecia provoca en los hombres "una pérdida de confianza en sí mismos, hace que se sientan menos atractivos y más viejos, y dificulta las relaciones con el entorno social y familiar". Estas son algunas de las conclusiones del estudio sociológico realizado entre más de 1.500 varones de Francia, Alemania, Italia, Reino Unido y España para analizar los efectos psicológicos asociados a la alopecia masculina y el impacto que ésta tiene sobre el estado de ánimo, la autoestima y la relación de pareja de los que la padecen.
Al respecto, el dermatólogo del Hospital Universitario Gregorio Marañón, Dr. Antonio Sánchez, que presentó el estudio, afirmó que la alopecia "tiene solución si se descubre desde las primeras fases de aparición", ya que existen "tratamientos clínicamente probados que han dado resultados positivos en pacientes con esta enfermedad", como Minoxidil y Propecia.
Respecto a los problemas derivados de la alopecia, el Dr. Sánchez destacó que son la causa por la que, en los últimos años, los especialistas españoles "perciben un aumento en el número de jóvenes, con edades comprendidas entre los 25 y los 35 años, que acuden a las consultas preocupados por su apariencia".
Estos jóvenes suelen dar el primer paso para acudir al médico de la mano de los padres, en concreto, de la madre "que es la que se da cuenta antes del cambio de carácter" que sufre el joven como consecuencia de la pérdida de cabello. En cambio, a partir de los 25 y los 30 años, la principal motivación para frenar la alopecia "es la pareja, ya que produce un impacto el cómo ésta pueda ver la enfermedad".
Respecto al perfil del hombre que decide consultar a un especialista, el citado dermatólogo señaló que se trata de "joven con un nivel cultural medio alto, que dispone de mayor información y se preocupa más por su imagen".
Por el contrario, apuntó que los hombres con un nivel cultural medio bajo "pasan primero por centros estéticos y tratamientos pseudocientíficos, como el láser, en los que se gastan mucho dinero".
Los pacientes que siguen esta vía "pseudocientífica", en opinión del Dr. Sánchez, "gastan mucho dinero", ya que a lo que destinan para costear los tratamientos de los centros de estética hay que sumar "el gasto inútil en cosmética, ampollas o champús recomendados por los peluqueros".
Frente a estos tratamientos, destacó que, en la actualidad, las técnicas empleadas para frenar la alopecia "han dado resultados clínicamente probados y han aumentado la confianza en los médicos".
Sin embargo, el estudio desvela que el 80% de los españoles con problemas de alopecia nunca han seguido un tratamiento médico, a pesar de que son los europeos que, junto a los italianos, más valoran el pelo como un aspecto importante de la imagen.
Al respecto, las respuestas de los encuestados desvelan que existe una tendencia similar en Europa a la hora de afrontar y vivir la aparición de la alopecia, aunque hay una serie de matices que diferencian entre sí a los hombres en función del país de procedencia.
Según este estudio, para el 38% de los españoles el aspecto más preocupante de la alopecia es que le hace "sentirse más envejecidos", mientras que el 35% reconoce que tiene 'miedo ante la posibilidad de quedarse calvos'. Los franceses se preocupan, en un 37%, por la "pérdida de una parte importante del atractivo físico" y un 40% tiene "miedo a quedarse calvo". Igualmente, el 43% de los italianos siente "la pérdida de una parte importante del atractivo físico" y un 45% tiene "miedo a quedarse calvo".
Asimismo, el estudio revela que los mayores temores de los alemanes son "sentirse más envejecidos" así como "perder una parte importante del atractivo personal". En comparación con el resto de europeos, junto con los ingleses, son los más preocupados por 'quedarse calvos' y, además, su alopecia les hace sentirse más deprimidos.
Al respecto, el dermatólogo del Hospital Universitario Gregorio Marañón, Dr. Antonio Sánchez, que presentó el estudio, afirmó que la alopecia "tiene solución si se descubre desde las primeras fases de aparición", ya que existen "tratamientos clínicamente probados que han dado resultados positivos en pacientes con esta enfermedad", como Minoxidil y Propecia.
Respecto a los problemas derivados de la alopecia, el Dr. Sánchez destacó que son la causa por la que, en los últimos años, los especialistas españoles "perciben un aumento en el número de jóvenes, con edades comprendidas entre los 25 y los 35 años, que acuden a las consultas preocupados por su apariencia".
Estos jóvenes suelen dar el primer paso para acudir al médico de la mano de los padres, en concreto, de la madre "que es la que se da cuenta antes del cambio de carácter" que sufre el joven como consecuencia de la pérdida de cabello. En cambio, a partir de los 25 y los 30 años, la principal motivación para frenar la alopecia "es la pareja, ya que produce un impacto el cómo ésta pueda ver la enfermedad".
Respecto al perfil del hombre que decide consultar a un especialista, el citado dermatólogo señaló que se trata de "joven con un nivel cultural medio alto, que dispone de mayor información y se preocupa más por su imagen".
Por el contrario, apuntó que los hombres con un nivel cultural medio bajo "pasan primero por centros estéticos y tratamientos pseudocientíficos, como el láser, en los que se gastan mucho dinero".
Los pacientes que siguen esta vía "pseudocientífica", en opinión del Dr. Sánchez, "gastan mucho dinero", ya que a lo que destinan para costear los tratamientos de los centros de estética hay que sumar "el gasto inútil en cosmética, ampollas o champús recomendados por los peluqueros".
Frente a estos tratamientos, destacó que, en la actualidad, las técnicas empleadas para frenar la alopecia "han dado resultados clínicamente probados y han aumentado la confianza en los médicos".
Sin embargo, el estudio desvela que el 80% de los españoles con problemas de alopecia nunca han seguido un tratamiento médico, a pesar de que son los europeos que, junto a los italianos, más valoran el pelo como un aspecto importante de la imagen.
Al respecto, las respuestas de los encuestados desvelan que existe una tendencia similar en Europa a la hora de afrontar y vivir la aparición de la alopecia, aunque hay una serie de matices que diferencian entre sí a los hombres en función del país de procedencia.
Según este estudio, para el 38% de los españoles el aspecto más preocupante de la alopecia es que le hace "sentirse más envejecidos", mientras que el 35% reconoce que tiene 'miedo ante la posibilidad de quedarse calvos'. Los franceses se preocupan, en un 37%, por la "pérdida de una parte importante del atractivo físico" y un 40% tiene "miedo a quedarse calvo". Igualmente, el 43% de los italianos siente "la pérdida de una parte importante del atractivo físico" y un 45% tiene "miedo a quedarse calvo".
Asimismo, el estudio revela que los mayores temores de los alemanes son "sentirse más envejecidos" así como "perder una parte importante del atractivo personal". En comparación con el resto de europeos, junto con los ingleses, son los más preocupados por 'quedarse calvos' y, además, su alopecia les hace sentirse más deprimidos.