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Este Lunes se publicó un video en el que se exponen las prácticas de gran parte de la industria capilar en China, un país con 250 millones de personas con alopecia
El reportaje fue grabado en modo encubierto por The Beijing News, en este reportaje se muestra un llamado centro de entrenamiento en la capital china, el cual proporciona dos días de instrucción a los estudiantes antes de dejarlos listos para empezar a ejercer por su cuenta, en opinión de los entrenadores después de 2 días ya estaban preparados para realizar un trasplante capilar a sus propios clientes.
A estos estudiantes se les informa de la teoría alrededor de un trasplante de cabello y de ahí empiezan a practicar por si mismos en unos moldes de silicona. Seguidamente empiezan a diseñar una zona de barba o una ceja y luego a insertar folículos en los agujeros. Después de algunas horas haciendo esto ya pasan a otra sala para empezar a prácticar con un paciente real, un pobre hombre de unos 30 años. En este punto del proceso se les va explicando a los estudiantes como poner la anestesia, crear tumescencia y ya de ahí se pasa a la fase de extracción de folículos de la zona donante para a continuación insertarlos en algún lugar de su zona despoblada.
En un momento durante el video, un "profesor" del centro le dice al reportero encubierto que se esta haciendo pasar por estudiante que la clase tiene la suerte de tener un paciente voluntario ese día. "De lo contrario, estarías practicando el uno con el otro", dice este Señor, con mayúsculas.
El precio del workshop, unos 7,800 yuanes (unos 1.000 euros) y una duración de dos días, muchos de estos nuevos "doctores capilares" después de adquirir algunas nociones rudimentarias en dichos talleres, empiezan a realizar transplantes de cabello en salones de belleza, de cosmética, peluquerías, etc.. En ese sentido la ley en China es similar a la de aquí, solo doctores con licencia activa pueden realizar trasplantes de cabello, en instalaciones apropiadas y autorizadas para tal fin.
El auge de esta industria clandestina está impulsado el gran potencial de ganancias. El año pasado, los ingresos generados por el mercado de los trasplantes de cabello en China superaron los 10 mil millones de yuanes, lo he tenido que poner en letra porque no me caben los ceros y de pasarlo a euros ya ni hablar. Los expertos vaticinan que la industria capilar en China pronto eclipsará los 100 mil millones de yuanes.
El caso se ha vuelto viral en las redes sociales chinas. En la plataforma de microblogueo Weibo, un hashtag que dice algo así como "un reportero encubierto recibe un curso acelerado de trasplante de cabello de tres días" se había visto 230 millones de veces hasta ayer martes por la tarde, osea en un día. Los comentarios de la mayoría eran del tipo "Prefiero estar calvo antes que arriesgar mi vida" o "Este tipo de malas prácticas en la industria capilar o cosmética es lo mismo que matar a gente por dinero".
Un experto comenta "Aunque los trasplantes de cabello son procedimientos relativamente simples, un cirujano debe estudiar durante al menos ocho años antes de realizar un trasplante capilar por si mismo de forma independiente; es una broma de mal gusto decir que dichos estudiantes pueden estar listos en tres días para conducir ellos mismos sus propias cirugías", . "Incluso para un procedimiento tan pequeño, un cirujano debe ser capaz de lidiar con posibles emergencias, como una reacción alérgica al anestésico".
El reportaje fue grabado en modo encubierto por The Beijing News, en este reportaje se muestra un llamado centro de entrenamiento en la capital china, el cual proporciona dos días de instrucción a los estudiantes antes de dejarlos listos para empezar a ejercer por su cuenta, en opinión de los entrenadores después de 2 días ya estaban preparados para realizar un trasplante capilar a sus propios clientes.
A estos estudiantes se les informa de la teoría alrededor de un trasplante de cabello y de ahí empiezan a practicar por si mismos en unos moldes de silicona. Seguidamente empiezan a diseñar una zona de barba o una ceja y luego a insertar folículos en los agujeros. Después de algunas horas haciendo esto ya pasan a otra sala para empezar a prácticar con un paciente real, un pobre hombre de unos 30 años. En este punto del proceso se les va explicando a los estudiantes como poner la anestesia, crear tumescencia y ya de ahí se pasa a la fase de extracción de folículos de la zona donante para a continuación insertarlos en algún lugar de su zona despoblada.
En un momento durante el video, un "profesor" del centro le dice al reportero encubierto que se esta haciendo pasar por estudiante que la clase tiene la suerte de tener un paciente voluntario ese día. "De lo contrario, estarías practicando el uno con el otro", dice este Señor, con mayúsculas.
El precio del workshop, unos 7,800 yuanes (unos 1.000 euros) y una duración de dos días, muchos de estos nuevos "doctores capilares" después de adquirir algunas nociones rudimentarias en dichos talleres, empiezan a realizar transplantes de cabello en salones de belleza, de cosmética, peluquerías, etc.. En ese sentido la ley en China es similar a la de aquí, solo doctores con licencia activa pueden realizar trasplantes de cabello, en instalaciones apropiadas y autorizadas para tal fin.
El auge de esta industria clandestina está impulsado el gran potencial de ganancias. El año pasado, los ingresos generados por el mercado de los trasplantes de cabello en China superaron los 10 mil millones de yuanes, lo he tenido que poner en letra porque no me caben los ceros y de pasarlo a euros ya ni hablar. Los expertos vaticinan que la industria capilar en China pronto eclipsará los 100 mil millones de yuanes.
El caso se ha vuelto viral en las redes sociales chinas. En la plataforma de microblogueo Weibo, un hashtag que dice algo así como "un reportero encubierto recibe un curso acelerado de trasplante de cabello de tres días" se había visto 230 millones de veces hasta ayer martes por la tarde, osea en un día. Los comentarios de la mayoría eran del tipo "Prefiero estar calvo antes que arriesgar mi vida" o "Este tipo de malas prácticas en la industria capilar o cosmética es lo mismo que matar a gente por dinero".
Un experto comenta "Aunque los trasplantes de cabello son procedimientos relativamente simples, un cirujano debe estudiar durante al menos ocho años antes de realizar un trasplante capilar por si mismo de forma independiente; es una broma de mal gusto decir que dichos estudiantes pueden estar listos en tres días para conducir ellos mismos sus propias cirugías", . "Incluso para un procedimiento tan pequeño, un cirujano debe ser capaz de lidiar con posibles emergencias, como una reacción alérgica al anestésico".
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